SER LGBTIQ+ EN UN AMBIENTE LABORAL DE MANUFACTURA 4.0 POR HÉCTOR SOLÍS
Mi nombre es Héctor Solís, tengo 40 años, soy de Monterrey (México), soy un hombre visiblemente gay casado con mi hermoso marido Aldo Zazueta en una relación estable desde hace 14 años con una gran y hermosa familia. Mi carrera profesional es la de ejecutivo de recursos humanos global para una firma multinacional de gestión de soluciones de energía y automatización. Les quiero contar mi experiencia de ser LGBTIQ+ en un ambiente laboral 4.0
En el año 2000 en la ciudad de Saltillo en el estado de Coahuila, me encontraba estudiando la Licenciatura en Administración e intuía que el ser gay me iba a acarrear ciertos problemas cuando iniciara mis prácticas profesionales, las cuales empezaron en una empresa de manufactura de componentes electrónicos y asientos automotrices, realmente estaba muy asustado sobre todo porque en esa empresa mi padre era parte de los líderes ejecutivos, imagínense el peso que caía sobre de no "fallar" ante mi padre o sus líderes y más por el prestigio de ser el Gerente de Operaciones a cargo de toda la planta productiva.
Pasaron los años y fui aprendiendo lo que tenía que aprender, empecé a ganar experiencia temprana en los negocios y operaciones hasta ser contratado de manera formal por la empresa un año después de haber terminado mis prácticas, me sentía muy contento y más porque pude demostrar que como profesional gay hice garras frente a los comentarios hirientes de colegas que en su momento me descalificaron debido a mi orientación sexual. Calificativos como ahí viene el rico, el niño fresa (en México así le decimos a los que son hijos de padres con buena posición económica, política o social), el hijo de papi, ha de ser joto, ha de ser maricón ya que nunca lo vemos con novia o no nos platica quién le atrae en el trabajo; etc.
En nuestra comunidad muchas veces lo laboral es una experiencia única, algunas en su mayoría muy negativas porque están marcadas por el miedo a ser despedidos si es que nos atrevemos a ser visibles o si por ahí alguien se entera, es una constante lucha por esconder quienes somos, en otras ocasiones a quien amamos o con quién vivimos. Así usamos mentiras como tengo novia, en el caso de los chicos, tengo novio, en el caso de las chicas. O estoy casado (a), finjo tener una familia y portar un anillo de bodas que en ocasiones es mera portada para evitar preguntas.
E incluso llegamos a comportarnos como si fuéramos una persona homofóbica, esto por seguir la corriente a los demás y el simple hecho que ven mal en la oficina ser gay, así que no quiero que me incluyan en las burlas y prefiero amenazar o hacer bullying a aquellos que han tenido la valentía de ser fieles a sí mismos. Y así podría enumerar muchas mentiras y situaciones incómodas por las que pasamos muchos profesionales en aras de lograr inclusión y aceptación en el mercado laboral.
Hoy por hoy a 18 años de mi camino profesional he ido construyendo mi ser profesional y personal con una mayor aceptación, motivado por esa luz que buscamos todos, todas, todes para encontrar el respeto, la sana convivencia y sobre todo ser un profesional que comparte con los demás su experiencia. Eso es lo que hice para llegar al estado de tranquilidad y aplomo en el que me encuentro hoy en día.
Sabemos que la discriminación hacia nuestra comunidad sigue a la orden del día, es nuestro compromiso y lucha diaria la que va a ayudar que más personas se sumen a la causa y podamos romper estas barreras que no deben existir.
Los datos en México de la Comisión Nacional de Derechos Humanos arrojan cifras como 2,935 denuncias a la Conapred por discriminación laboral, 54% de las personas LGBT+ no revelan su orientación sexual en el trabajo, 35% no obtienen un empleo por su preferencia sexual, el 20% es cuestionado por sus preferencias durante una entrevista de trabajo, 26% es despedido por su orientación sexual y el 35% ha sufrido discriminación por parte de sus jefes. Pero eso no es todo si bien estas son las estadísticas, ¿cuáles son los daños que produce la discriminación? No querer ir a trabajar, aislamiento, depresión, pérdida de amistades, cambio de empleo y pensamientos suicidas.
Estos son algunos números que siguen incrementándose día a día, año a año, y más dentro de los ambientes que constituyen a las profesiones de algunos sectores como el de la ciencia, la tecnología, la ingeniería o las matemáticas (STEM, por sus siglas en inglés). Así como han habido grandes avances para la comunidad LGBTIQ+, también en el campo de la tecnología.
Hoy en casi todas las grandes plantas del mundo existe una incorporación hacia la manufactura 4.0 que no es más que la nueva era de la digitalización y conectividad dentro de los ramos industriales donde la tecnología conecta todo a nuestro alrededor o lo que llamamos el IoT (InterneT de las Cosas), tenemos brazos robóticos que facilitan la producción y la automatización es cada vez más parte de nuestra cotidianidad. Para llegar a esto la industria se transformó buscado evolucionar, innovar y crecer, pero aquellas que no lo hicieron o no lo han hecho están siendo sustituidas por aquellas que sí.
Esto mismo ha pasado con nuestra comunidad y la manera en que las industrias poco a poco van transformándose, dando pie a industrias más incluyentes y diversas donde el apoyo a las diversidades constituye un elemento fundamental en el incremento de la productividad, fortalece los lazos de colaboración entre equipos de trabajo multidisciplinarios y multiculturales donde debe haber una apertura total para todas las personas y su individualidad, donde se respete y se promueva el espacio inclusivo, fuera de acosos, vocabulario inadecuado, y se elaboren procedimientos y políticas que lo avalen y lo hagan respetar y que cada colaborador se sienta pertenecido y valorado.
En la actualidad llegamos son casi 30 países los que han aprobado el matrimonio igualitario; desde Canadá, el primero en el continente americano en 2005, hasta Argentina, el pionero en América Latina en el 2010. En México no es una ley federal, pero son 19 las entidades federativas en México que lo reconocen; la primera fue la Ciudad de México en 2010, junto con la adopción homoparental.
Un estudio citado por el Foro Económico Mundial señala que si Estados Unidos promoviera con más ahínco la incorporación del talento LGBTIQ+ en especial áreas como la STEM. se decir de a ciencia y la tecnología se podría incrementar su Producto Interno Bruto en más de 9 mil millones de dólares. Los números son claros en ese sentido, pues las empresas con políticas de inclusión LGBTIQ+ tienden a innovar más.
Un estudio reciente de la Universidad de Otago, en Nueva Zelandia, analizó el Índice de complejidad económica y la relación con el matrimonio entre parejas del mismo sexo. Lo que encontró es una conclusión similar: en los países donde hay mayores esfuerzos de inclusión de comunidades LGBTIQ+ el indicador de innovación suele aumentar. Igualmente, hay múltiples artículos que destacan cómo la comunidad LGBTIQ+ de San Francisco, una de las más icónicas del planeta, tuvo una participación fuerte en la construcción de lo que hoy se conocer como Silicon Valley.
Las empresas que son inclusivas fomentan la creatividad y la innovación en un mundo digital cada vez más cambiante. A algunos líderes de empresas todavía les preocupa que participar en los derechos LGBTIQ+ (lesbianas, gays, bisexuales, transgénero, queer) genere críticas similares. La sabiduría tradicional sugiere que abordar un tema aún divisivo puede alienar a quienes están en contra del matrimonio entre personas del mismo sexo y otros problemas de nuestra comunidad. El temor es que si suficientes clientes, empleados o inversionistas se ofenden, podrían iniciar boicots, renunciar a sus trabajos o vender sus acciones, perjudicando el desempeño financiero de la empresa en el proceso.
Sin embargo, cada vez más empresas sobre todo las transnacionales o multinacionales están "saliendo del clóset" y realmente abogando por su población LGBTIQ+ fomentando prácticas y procesos inclusivos o diversos y hacer de la diversidad una verdadera cultura, una cultura adherida al ADN de la empresa y sus colaboradores. A pesar de los riesgos, algunas empresas globales están redoblando esfuerzos para apoyar a los empleados diversos. Los directivos de los lugares de trabajo dan su apoyo y se van sumando mucho más aliados en favor de la diversidad y la inclusión a las personas LGBTIQ+.
Google elogia públicamente a sus Employee Resource Groups o Grupos de Recursos para los empleados (comunidades o grupos de empleados de alguna diversidad) algunos ejemplos de ellos son:
Gayglers (que "elabora programas y políticas, para que Google siga siendo un lugar de trabajo que funciona para todos").
Trans en Google (que "busca garantizar que los procesos y las políticas de la empresa sean inclusivos de todas las identidades y expresiones de género ”).
La sección "Orgullo" de Microsoft de su sitio web tiene videos de "personas que nos inspiran" y sugerencias sobre cómo las personas pueden apoyar financieramente a las organizaciones sin fines de lucro LGBTQ.
Y así cada vez más se van sumando más y más empresas que van dejando de lado el miedo a perder clientes y negocio en favor de apoyar, desarrollar, respetar y fomentar la innovación con talento diverso y disruptivo que genere más ideas de negocio y esté dispuesto a evolucionar en un mundo digital con mayores retos y sinergia corporativa.
No todo es malo, en el mundo de los negocios y ciertamente poco a poco vamos viendo una mayor apertura hacia nuestra comunidad y más con los efectos psicológicos de la pandemia por el COVID 19 el ser humano está en una encrucijada emocional donde vemos mayor resiliencia y entendamos resiliencia como la capacidad que posee cada persona para hacer frente a sus propios problemas, superar los obstáculos y no ceder a la presión, independientemente de la o las situaciones se muestra la capacidad de un individuo para sobreponerse a períodos de dolor emocional y traumas.
Si bien hablo de mi experiencia y parece ser que ya superé o pude superar mis obstáculos sé y entiendo que hay muchas personas que no, por eso quiero compartir este artículo a manera de apoyo y motivación para hacer que más personas a su tiempo y paso se den la oportunidad de ser ellos mismos de acuerdo a lo que vayas viendo, observa en tu centro de trabajo sobre cómo la empresa apoya o no a la comunidad o si existen aliados a la causa que puedan apoyarnos a ir saliendo o ir siendo más resilientes para ser únicos. Y si ves la posibilidad y lo crees necesario el NO decirlo y el NO ser visible también es de respetarse porque cada individuo merece estar seguro(a) en su lugar de trabajo y no peligrar, por ello el proceso de ser visibles depende de las capacidades, oportunidades y posibilidades de cada quien.
Date la oportunidad de ir poco a poco perdiendo el miedo al rechazo o al despido, las empresas NO deben ni tienen porque despedirte por ser quien eres, y para hacerle frente a ello te invito a que investigues en tu país cuáles son los instrumentos legales/laborales que te permitan estar protegido (a) ante cualquier eventualidad y que sientas que fue injustificadamente por tu orientación sexual o identidad de género. También hay una red de empresas a nivel nacional que puedes usar en tu país de residencia tal es el caso como Pride Connection, la comisión de derechos humanos local o regional y colectivos u organizaciones locales de la comunidad en tu país.
NO estás solo, sola, date tiempo de ir poco a poco siendo visible y quitarte miedos que no te dejan vivir, te aplaudo por tu valentía de querer salir adelante y si estás cómodo con quien eres y lo que comunicas o no, YO te aplaudo y brindo por ti por no dejarte intimidar ante cualquier persona o situación. SI eres una persona aliada a la comunidad LGBTIQ+ también te aplaudo y te agradezco por dar tu apoyo incondicional a la comunidad y fomentar el clima de respeto, empatía y apoyo a tus compañeros, amigos y familiares LGBTIQ+.
Les dejo abajo la liga para ingresar al foro de Industria 4.0 que Hannover Hesse en México realizó en el mes de octubre del 2020 en el cual hablo sobre mi experiencia en el sector industrial y mi resiliencia en el ámbito laboral hasta el día de hoy, te comparto también la liga para mi blog en mi empresa donde hablo sobre mi experiencia como Ejecutivo LGBTIQ+
Excelente artículo Héctor. Felicitaciones!
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